Claves para entender la factura de la luz

Llega la factura de la luz y directamente miramos la cifra de cuánto debemos pagar. Sólo nos detenemos para intentar descifrarla cuando es más elevada de lo habitual. A continuación vamos a segregar cada uno de los conceptos presentes en cualquier factura de la electricidad, comúnmente llamada “factura de la luz”, para poder entenderla mejor. Billete de cincuenta euros y bombilla de luz En primer lugar, en la parte superior del documento figuran los datos generales del cliente y del contrato de suministro. Datos del cliente Son aquellos que hacen referencia al cliente y lo identifican como tal: Nombre o razón social del titular del contrato NIF o CIF Dirección de suministro Código universal del punto de suministro o CUPS. En España es el número de identificación del contador con 20 o 22 dígitos y empieza por ES Potencia contratada. Cantidad de kW incluidos en el contrato. Es un valor fijo y dependerá de las necesidades energéticas de cada cliente. Tarifa contratada. Es el tipo de tarifa con la que nos van a facturar cada kWh consumido. Viene determinada en función de nuestra tensión de suministro (baja, media o alta tensión) y potencia que hemos contratado. Hay diferentes tipos que se ajustan a las necesidades de cada usuario, por ejemplo la TUR para usuarios domésticos, discriminación horaria, bonos sociales, etc. Contrato de acceso. Se trata de un número identificativo del contrato establecido con la distribuidora por el cual ésta cede el uso de las redes de distribución para hacer llegar la electricidad al punto de suministro del cliente. La empresa distribuidora percibe por ello los peajes de acceso, que son un concepto regulado implícito en el precio de la energía Resumen de la factura Es un pequeño resumen que se adjunta para que de un vistazo rápido el usuario se haga una idea del importe final. En él aparecen los siguientes datos: Fecha de emisión o fecha de factura: día en la que la empresa comercializadora ha generado la factura Periodo de facturación: periodo de lectura que se tiene en cuenta para determinar el consumo a facturar Número de factura: cifra identificativa de cada factura Importe total de la factura: el valor total de la factura Desglose de facturación Es la parte cuantitativa de la factura y hace referencia a lo que se ha consumido durante el periodo de facturación. Aparecen los siguientes apartados: Término de potencia. Hace referencia al uso de la potencia contratada por parte del cliente. Es el resultado de la potencia a facturar multiplicado por el precio del término de potencia y divido por el número de días del periodo de lectura Término de energía activa. Indica el consumo de energía en kWh realizado en el periodo de lectura multiplicado por el precio unitario del término de energía por cada periodo tarifario. La suma del total de cada uno de los periodos es el resultado global del término de energía Descuentos. En el momento de realizar el contrato existen tarifas especiales o descuentos que puede promocionar la comercializadora Penalizaciones. En el caso de que se exceda en la potencia contratada o el consumo de energía reactiva supere el 33% del consumo de energía activa, infiere en penalizaciones en la factura Alquiler del equipo. Cuando el equipo de medida no es propiedad del cliente, se paga a la distribuidora en importe mensual en concepto de alquiler del contador Impuestos. Hay dos tipos de impuestos que se abonan en este concepto: Impuesto sobre la electricidad: que es el 5,1227% (1,035113 x 4,864%) aplicado sobre la base del importe total de término de potencia, término de energía y a la penalización por consumo de energía reactiva. Impuesto General sobre el Valor Añadido o IVA: siendo el 21% sobre el total de los conceptos de facturación. El recibo de la electricidad, por tanto, será la suma de todos los conceptos anteriores. Fuentes: Ministerio de Industria, Energía y Turismo / Flickr / Twenergy